Plazo fijo: los bancos aplicaron la baja de tasas, ¿cuánto pagan los 10 principales?
Después de una nueva reducción en la tasa de referencia del Banco Central, que ayer pasó del 80% al 70% nominal anual, los bancos han procedido de inmediato a disminuir los rendimientos ofrecidos a sus clientes por los depósitos a plazo fijo de 30 días. En consonancia con la disminución de la autoridad monetaria, los diez principales bancos del país han reducido sus tasas en aproximadamente un 10%.
Un rápido sondeo realizado por este medio sobre las tasas ofrecidas por los 10 bancos más grandes del país en términos de depósitos ha revelado un descenso promedio de poco más de 10 puntos porcentuales en la tasa nominal anual para depósitos a 30 días. Este recorte tuvo lugar esta mañana, sumándose a una serie de reducciones que han resultado de las decisiones de política monetaria y la eliminación de las normas que establecían un mínimo para los rendimientos.
Si el pasado 12 de marzo, primer día de tasas libres, los rendimientos de los plazos fijos minoristas llegaron a caer hasta 40 puntos porcentuales, ayer se sumaron 10 puntos más a una tendencia que ya venía reduciendo gradualmente sus cifras.
En la actualidad, entre los 10 principales bancos argentinos, la tasa promedio se sitúa prácticamente en un 60% nominal anual, lo que se traduce en un rendimiento efectivo mensual del 4.93%. Por ejemplo, un depósito a plazo fijo de $100.000 después de 30 días arrojaría un total de $104.931,51 en capital más intereses.
Así están las tasas que ofrecen cada uno de esos diez bancos, prácticamente todos pagan un 60% nominal anual, según datos recopilados de sus plataformas online y aplicaciones móviles.
Desde su asunción en diciembre pasado, el ministro de Economía Luis Caputo ha estado trabajando en mantener tasas de interés negativas en términos reales, es decir, tasas que no logran compensar la pérdida de poder adquisitivo debido a la inflación.
En diciembre, el BCRA redujo las tasas de los depósitos a plazo fijo de 30 días del 133% al 110% nominal anual. A principios de marzo, bajó la tasa de referencia y eliminó el mínimo de tasas impuesto a los bancos para sus depósitos. Ayer, se aplicó un nuevo recorte para llevar la tasa de referencia al 70% nominal anual.
Esta estrategia, solo una parte de un enfoque más amplio, busca evitar que los pasivos remunerados del BCRA generen una emisión endógena de dinero al pagar rendimientos que hagan crecer la masa monetaria a un ritmo mayor que la inflación, entre otros objetivos.
Como el rendimiento de los depósitos a plazo fijo depende en gran medida de lo que pagan los pasivos monetarios del BCRA a las entidades bancarias, el resultado para los ahorristas por los plazos fijos ha disminuido considerablemente.
Sin embargo, el esquema macroeconómico inicial de la gestión de Caputo ha generado situaciones paradójicas. A pesar de perder frente a la inflación, los plazos fijos en pesos resultaron ser una estrategia interesante en términos de dólares. Dado que el dólar libre y las cotizaciones financieras de la divisa se debilitaron, los ahorristas que mantuvieron sus plazos fijos llegaron a obtener ganancias mensuales del orden del 30%.
Este carry trade, aunque no estuvo exento de riesgos, produjo resultados muy lucrativos: vender $1.000 dólares, colocar un plazo fijo con los pesos y esperar 30 días para luego recomprar divisas implicaba cerrar la inversión con $1.300 en el bolsillo en el pasado reciente.